Mi jefe hoy me dijo: "Tu eres una persona con carácter fuerte", yo me reí, y le conteste: eso no es cierto, ojalá fuera así por lo menos no me afectarían muchas cosas".
Las personas solemos etiquetar a los demás por lo que a simple vista vemos, incluso nosotros nos etiquetamos, la mayoría de las veces para minimizarnos y otras tantas nos maximizamos.
Las palabras de mi jefe me hicieron reflexionar en algo para lo que he trabajado mucho desde ya casi dos años que emprendí la aventura de "la independencia", primero había comenzado a darme cuenta de mi cambio, pero no me percate si los demás lo notaban y menos si lo aprobaban. Segundo, me doy cuenta de que notan mi cambio, porque les molesta (risa burlona), porque acostumbre a las personas a que nunca me quejé de tal o cual cosa, tercero, ahora que digo lo que pienso en el momento o por lo menos no me lo guardo, me dicen: "yo te consideraba una persona inteligente" o sea, que hablar de lo que a mi no se me hace justo y tener que aguantar algo de lo que no estoy de acuerdo es simultáneamente una falta y claro para hacer sentirme mal utilizan esas frases de yo esperaba más de ti. Me pregunto en que momento deja uno de ser "buena onda" para convertirse en la mala del cuento?
Creo que mi jefe aparte de explotarme laboralmente quiso hoy explotarme psicológicamente, pero no me deje, porque no en vano le invierto a la terapia, a mi psicóloga le debo lo picuda que ahora soy (risa norma). No soy el títere de nadie, simplemente ahora puedo ponerle limite a las personas, porque comprendí que no le daré gusto a todos lo que me rodean sacrificando mi bienestar, así que primero yo y si están de acuerdo, bien, y si no pues como muchas veces mi madre me decía... mándalos a la #$%!#$/&/%$...
Por cierto la foto: son pruebas de luz de pelo que nos en cargaron hacer para un colegio, a mi se me ocurrió una así, eso dijeron, luz de pelo no?
