...porque un solo lugar no es suficiente, necesite de re inventarme la vida y termine en las orillas, al filo del abismo no hay otra opción solo volver a comenzar...

10 de junio de 2010

Estoy cambiando...

Estoy muerta, mi vista esta muy cansada; y cómo no si llevo más de 12 hrs. aquí.. entre cotizaciones, correos, citas canceladas, balaceras inesperadas, ventanas y ventanas en el chat... entran unos, se van otros, me bajo a comer, regreso y sigo platicando con mis amigos que están lejos, vaya esto es muy sedentario... pero lo disfrutaré porque nada es para siempre... disculpen esta migaja de entrada pero no aguanto mis ojitos... que tengan un lindo día.. lleno de bondades.

8 de junio de 2010

Una jaibita muy regia


Ella es Lupita, una jaibita muy regia.

Hace tiempo escribí acerca de Lupita una señora de 80 y tantos años, vegetariana, felizmente soltera y tampiqueña.

En mi último viaje a Monterrey después de montar la obra en casa de cultura, me dieron ray a la discreta palomita del Museo Marco, me despedí de beso en la mejilla de la persona que me llevo en su carro y con una mirada llena de ataduras casi me inmoviliza, sí, casi, pero no lo logró. 

Caminé para comer en el restaurante "Las horas" en Barrio Antiguo, prácticamente fui la única que entro a ese lugar, de beber pedí una indio pero bien muerta, me tome dos, me fume un cigarro camino al depa de Lupita, cuando iba subiendo ella iba bajando, me reconoció y luego luego me invito a pasar, le dio gusto verme, soy una extraña para ella solo dos veces nos hemos visto y me dijo que cuando quisiera podía llegar a su casa sin pagar nada, es una mujer muy amable y sobre todo feliz, dice que no se siente sola, que ella decidió no casarse y me recomendó lo mismo (risas). Jamás volvió a Tampico, desde los 20 años, pero su trabajo la llevo a conocer varias ciudades de Estados Unidos, recorrió pasarelas de moda, ella hacia los diseños de una empresa regiomontana.

Le pedí que nos tomáramos una foto juntas, pensé que me diría que no, pero accedió, me recuerdo tanto cuando entre por primera vez al asilo de personas de la tercera edad al cual le diseñe su imagen corporativa para mi tesis de examen profesional, necesitaba fotos para la publicidad y estaba sentada cerca de la ventana Lolita, la luz bañaba sus canitas plateadas, cuanta nostalgia hay en esos lugares, los aromas son tan lejanos. 

Después de ahí me fui al bar pedorro como a bien lo re bautizó Mónica y ahí bebimos hasta las 3 am. muy "agustín lara" como diría el majo.

Marco quedó en cortarle el pelo pero creo que ya se esta haciendo pato (risas) sé que te envío mis post a tu mail eres de los 10 personas privilegiados así que no te hagas el sordo, ni el que la virgen te habla, cuando vayas a Monterrey dale una vuelta a Lupita, córtale el pelo. 


7 de junio de 2010

Viernes 11-11 Domingo


La visita inesperada de un amigo...

Hace tiempo conocí a una persona de conversación interesante, respetuoso, atento, un principito sacado del cuento de Antoine de Saint-Exupér. Paso el tiempo y como de esas cosas que ni siquiera imaginas que ocurran, gracias a la tecnología volvimos a contactarnos, y de un momento a otro me dijo salgo para Tampico a las 11 de la noche y llego a las 6 de la mañana de este sábado.

Llegue a la central muy temprano y pasados 15 min. llego el personaje esperado. Desayunamos y fuimos juntos a la ultima capacitación de la universidad a la que cada sábado he asistido, después de ahí volamos directamente y sin escala hacia la playa. Yo necesitaba estar a lado de una persona que me diera paz y mucha tranquilidad, él deseaba nuevos aires... la playa era lo ideal.

Nos pusimos al tanto de nuestras vidas...

Un niño se adueño de nuestra sombra y saqueó dos cubetitas de arena, después abusando de su inocencia con su mano llena de arena toco mi brazo, poco falto para que le arrimara un cocote, pero me quede perpleja ante tanta desinhibición del chamaco.

Nos reímos como niños y aunque no hicimos castillos de arena que fácilmente los derribará el viento, creo que todo lo que platicamos salió del alma, como si nunca hubiera pasado el tiempo, todo fue tan relajado que aun siento que el fin de semana no ha terminado y ya son las 2:22 am. del día lunes y vas casi a la mitad de la distancia total que nos separa.

Presiento que de un tiempo a la fecha yo me he puesto al filo del abismo, pero la vida es muy bondadosa, siempre me manda a alguien que me salva antes de caer, esas personas lo valen todo, son los que se quedan cuando todos se han ido, son esa mano que alcanzas a ver cuando una fuerte ola te ha tumbado, por eso estoy muy contenta de retomar nuestra amistad y como bien dijiste: en dos días no discutimos y no porque no tengamos diferencias, sino porque nos aceptamos como somos, eso se llama respeto, compartimos letras de Joaquín Sabina, conversaciones verdaderamente profundas, aterrice muchas ideas que vagan absurdamente y llegue a la conclusión de que eres un cabrón (risas) y eso en ti es un halago.

Siento indiferencia por aquellas personas que con una miserable calidad moral te tiran la primera piedra, dicen por ahí que con la vara que midas serás medido y para tomar decisiones no se necesitan excusas; simplemente lo haces y listo, no creen?  Pero de esas personas no quiero ni una en mi vida, ni la mitad de una, ni para muestra, ni para no dejar. Así paso este fin de semana que pintaba desolador con tu visita se volvió acogedor (risas).