...porque un solo lugar no es suficiente, necesite de re inventarme la vida y termine en las orillas, al filo del abismo no hay otra opción solo volver a comenzar...

12 de mayo de 2010

Hablar de uno

Hablar de uno, sin perder la calma, hablar de uno sin desnudar la cama, hablar de uno sin llegar a ser dos, hablar de uno sin dejar de ser uno... hablar.

Hablar y callar es lo mismo, en ambos las palabras mueren asfixiadas, colmadas de nada, petrificadas en el caos. Hablar aburre, agobia al más tranquilo, para qué hablamos? para qué pronunciamos lo impronunciable, lo poco elocuente, lo falso.

Hablar y hablarte nunca será lo mismo, hablarte es perder la fe, es caer en el abismo de mi sueño recurrente, es no saber moverme, es encontrase con el frío guardado en las bolsas de mi abrigo verde que no tengo, hablarte por las noches cuando el insomnio me acompaña sentado sobre el sofá de Ofelia, hablarte cuando se que no duermes, te hablo aunque no me alcances a escuchar para que me recuerdes.

Hablar cuando todos callan, es evitar que el silencio devore los segundos, hablar cuando todos hablan es sentar a la soledad mirando hacia la pared, hablar por hablar es una agobiante necesidad de decir -aquí estoy, pero pronto me iré. 

Cuando callas, quisera estrujarte el esqueleto, escudriñar tus sentidos, me pregunto cada noche, dónde yace tu cuerpo? en que miserable pagina del libro antiguo te perdiste, en que versículo dejaste de saber que existo gracias a ti, en que Apocalipsis destruiste nuestro amor... 

Ya no quiero tus palabras huecas y tus silencios que carcomen las paredes de mi alma, ya no quiero que me preguntes: cómo estás? tus palabras se desvanecen como pétalos de sal en la orilla del mar. Quieres saber como estoy, te lo diré: estoy que me lleva la chingada, estoy que vivo huérfana de padre desde hace mucho tiempo, antes de génesis, antes de los océanos y antes de mis primeras palabras, estoy en forma de humo gracias a ti, estoy que por poco te odio y no dudo que te lo mereces...


...lo que más te disgusta de mi es lo que tu eres, tus miedos también son los míos, mi soledad en parte también es la tuya, mi vida te la debo y te la pagaré, siendo lo que tu no te atreviste a ser y esa será nuestra diferencia.

9 de mayo de 2010

nuevos amaneceres...


Playa Miramar 2010


Muchas veces me imaginaba un lugar seguro muy parecido a este, todo llega a su momento, los días de estrés, de tomar el camión, de caminar hacia el trabajo, de checar la tarjeta de asistencia, de ver las mismas caras sumergidas en el cotidiano, de lidiar con la mediocridad de medio día, las envidias y los tubos para fotografías, se han acabado, ahora son otras las calamidades pero jamás como las del pasado.

Ahora que regresé a Monterrey será extraño, aunque solo sea un fin de semana, seguro querré volver lo más pronto posible, no podré huir por más tiempo de este lugar, nadie se resiste a estos amaneceres, ni al puerto de cuyo nombre no quiero acordarme, porque es mejor la amnesia cuando se vive aquí.

Y como dijo hace días mi padre, aquí se vive mejor, todo esta permitido y no nos falta nada!