Querida Natalia:
Hemos decidido legalizar el amor que sentimos tu tío Rodolfo y yo.
Hace tiempo pensaba, que eso de casarse no era para mí, me creí incapaz de formar un hogar, incapaz de responder a las presiones sociales, por eso me enfoque en acumular triunfos profesionales. Todo por llenar ese hueco que poco a poco se hace más grande con el tiempo. Viaje y me mude y busque la felicidad de mil maneras como algún día te podrás imaginar y no encontré satisfacción en nada, acostumbrada al vació de una casa tan grande. Un día conocí a un chico muy apuesto de notable sencillez y carácter a pasible al poco tiempo me sentí tan cómoda con su convivencia, su forma de ver la vida es tan distinta a la mía, pero lo mejor de él es que me correspondía de la misma manera.
Cuando no lo veía, ese hueco del que te hable al principio volvía siempre, cada vez más agudo como cólico en el estómago. Comprendí que se trataba de la persona que tanto había buscado, comprendí que con él tendría que pasar el resto de mi vida si Dios me lo permite. A veces nena, nos negamos a ver la felicidad frente a nosotros, espero que no te pase eso a ti, pero si te llega a pasar, espero que te des cuenta a tiempo.
El compañero que esta destinado en nuestras vidas llega, tarde o temprano llega. No tienes que buscar ni viajar, mucho menos mudarte; sencillamente algún día llega y solo hay que tener dispuesto el corazón y los ojos abiertos para observar las señales. Siento por tu tío Rodolfo un amor profundo, que a la vez día con día nos sorprende. No hay otra persona que aguante mis berrinches como él, no hay nadie que se ocupe de mi, como él, y no hay nadie que escuche cada palabra que digo (excepto cuando ve la tele y juega Xbox)... en resumen quiero que comprendas algo, se paciente cuando se trate de amor, se muy paciente, espera a que el pastel termine de hornearse, no quieras hacer las cosas de manera impetuosa, espera que todo en la vida tiene un tiempo perfecto y maravilloso siempre y cuando le dejes estas cosas a Jehová.
De tu tía ahora puedes esperar cualquier cosa, como por ejemplo que te diga que te amo y a veces quiera comerme tu pie y termines molesta conmigo, así pasa cuando amamos a alguien, lo lastimamos por nuestra imperfección así que vos recuerda que te amo, que eres mi sobrina consentida, que hay días en que te baño de besos, y si te digo gordita de huevo con papa es porque te amo.
Tu tía en su último fin de soltera!
